CILA en el 50° aniversario del IDU en Bogotá
Desde sus principios, por marzo de 1972, el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) ha identificado las necesidades de la ciudad para planear el desarrollo de la infraestructura vial. Según Diego Sánchez Fonseca, director del IDU, en estos 50 años se han transformado la movilidad de las vías de los ciudadanos de Bogotá, con mejores vías de acceso para peatones, ciclistas y vehículos.
Con motivo de festejo de sus 50 años, el IDU realizó un evento académico denominado “Desafíos Urbanos: modelos de gestión de ciudades en armonía con la naturaleza”. Durante el evento se desarrollaron 4 paneles que permitieron generar un espacio de conversación entre actores globales y locales, líderes de las agendas de desarrollo y modelos de transformaciones urbanas integrales, vistas a través de sus conocimientos, experiencias y buenas prácticas en la implementación de modelos de gestión y apuestas de cambios para las futuras ciudades sostenibles.
Dentro del tercer panel, orientado a la transformación sociocultural y de co-creación urbana, Asuntos del Sur participó en voz de Matías Bianchi (director ejecutivo de Asuntos del Sur) quien se enfocó en el concepto de inteligencia colectiva como herramienta para gobernar. Retomando lo que nos dejó la pandemia, plantea existe una gran complejidad de los desafíos que enfrentamos en la sociedad y, la crisis sanitaria, demostró que los gobiernos no estaban preparados para hacerles frente. Estos desafíos que profundizó la pandemia, no pueden resolverse desde la individualidad ya sea desde un gobierno, una empresa o una comunidad de la sociedad civil. Es por esto que la inteligencia colectiva cobra un papel central a la hora de hacer frente a los desafíos sociales y políticos. La inteligencia colectiva busca cómo producir bienes públicos con saberes, herramientas y capacidades que existen en un espacio como las ciudades. Para lograrlo, existen ciertos estándares para garantizar que el proceso de inteligencia colectiva sea abierto, inclusivo y diverso. Como también que promueva la seguridad de quienes participen, que sea vinculante y que tenga la capacidad de trazabilidad y agregación, es decir, llevar a cabo un registro metodológicamente riguroso.
En este punto, las ciudades son la arena privilegiada para que esto suceda porque se concentran las oportunidades. Las ciudades deben tener la capacidad de entender y habilitar espacios donde la sociedad, en sus múltiples vertientes, se encuentren para crear algo que no existe, es decir, para co crear. Un ejemplo de estos espacios fue el encuentro organizado por el Consorcio Internacional de Localidades en Acción, denominado Conexión CILA y llevado a cabo el 8 de octubre del 2022 en la Universidad Jorge Tadeo Lozano, Bogotá, Colombia. Este encuentro se propuso como un espacio de inteligencia colectiva para intercambiar experiencias, abordar los desafíos de gobernanza y trabajar sobre respuestas innovadoras de las ciudades del sur global desde tres ejes temáticos: democracia diversa, democracia ambiental y democracia innovadora. En este encuentro se implementaron talleres de co-creación y espacios de intercambio de saberes y experiencias entre organizaciones de la sociedad civil, representantes de gobiernos locales y academia para intercambiar, potenciar y encontrar respuestas colectivas a desafíos comunes de las ciudades del Sur Global.
Este y otros espacios, nos deben servir como buenos ejemplos para impulsar la inteligencia colectiva como herramienta para gobernar y para la transformación sociocultural en pos de un modelo de vida más sostenible, inclusivo y en armonía con el ambiente.
Por Fiorella Ricagno, Pasante de CILA.
